viernes, 16 de mayo de 2014

CRÍTICA DEL 4x06 DE "JUEGO DE TRONOS" (CON SPOILERS)



*ATENCIÓN, ESTA CRÍTICA CONTIENE SPOILERS*

Le están dando bastante protagonisto a la trama de Stannis en esta temporada, y eso está bastante bien, pues aparecen cosas que no se explican en los libros pero que de verdad suceden. A veces siento lástima por Davos; con lo que ha sufrido, y sigue siendo fiel y leal, un buen amigo. Es tan bueno, que lo puede acabar pasando mal, porque muchos se pueden aprovechar de él.

Me gusta mucho Asha, la hermana de Theon (no me acuerdo de como la llaman en la serie, pues le cambian el nombre). Ha luchado por su hermano, pero es él el que ha cambiado, cosa totalmente entendible, ya que Ramsay lo ha dejado hecho polvo. Ese Ramsay me pone nerviosa, sus ojos claros, su sonrisa perpetua y jactanciosa, su voz suave pero temible. Es un personaje odioso, pero a la vez imprescindible.

También es sorprendente la asombrosa transformación de Theon a Reek. Antes era un fanfarrón, no tenía escrúpulos y era algo estúpido (por no decir mucho). Ahora es un ser hecho de huesos y piel seca y resquebrajada, con un carácter cobarde y mucho más estúpido que anteriormente. Pero este cambio radical es comprensible, las torturas de Ramsay pasan factura. Igualmente, aunque el bastardo sea de armas tomar, siempre será controlado por su padre Roose Bolton, o eso parece.

Cada vez, las escenas de Daenerys están teniendo menos importancia. Podrían hacer menos escenas de su trama en esta temporada, pues en esta parte de la historia no pasan muchas cosas. Van a suceder muchas cosas, eso sí, pero de momento muy poco.
Hay gente que me ha dicho que los dragones cada vez están peor hechos, y no sé si es que yo soy una inexperta en la informática y los efectos especiales, pero para mi gusto están muy bien logrados. Sí que están sabiendo desarrollar muy bien el conflicto que hay con el crecimiento de los dragones, pues están alcanzando cada vez más independencia, y cada vez necesitan menos a Dany.

Ahora hablemos de la mejor parte del capítulo. El juicio de Tyrion. Hablemos primero de los testigos; Meryn Trant, el hombre plano y frío, parece que sin sentimientos, más o menos como Ilyn Payne, ambos sólo viven para servir. Varys, que es un personaje que me encanta, y que para no estar en el punto de mira acusa a Tyrion del genocidio. Cersei, bueno... ya sabíamos lo que iba a decir, que si mi Joff, que si Tyrion malnacido, que si lo odia, que si sabe que él es el asesino, palabrerías.
Luego aparece Shae, el testigo que Tyrion se esperaba menos. Ella que entra con solemnidad pero a la vez con temor, y él que la mira atónito, fuera de si. Shae acusándolo de todo, y encima de prepararlo con la pobre Sansa. Muchos debéis de pensar que Shae es horrible, que cómo se atreve a decir tal sarta de mentiras, pero en realidad lo hace por su propia seguridad y yo lo entiendo. Así también se gana un dinero y puede estar más segura de que no la matarán ni la acusarán de traidora.

Y finalmente, la mejor escena de todas. Cuando están a punto de decir que es completamente culpable, estalla de rabia y confiesa su mayor crimen: ser un enano. Porque las personas solo lo ven malo por ese motivo, y es una gran reflexión sobre juzgar por las apariencias. También confiesa que no asesinó a Joffrey, pero que disfrutó viéndolo perecer, y encima se lo restriega a Cersei, que lo mira lleno de ira y odio. Su objetivo: pedir un juicio por combate. Y así finaliza este buenísimo capítulo, el mejor de la cuarta temporada de momento.

Que no me olvide yo de felicitar a Peter Dinklage, por su enorme talento y esfuerzo, se merece otro Emmy y muchísimos más. Realmente es la persona idónea para interpretar a nuestro querido Tyrion.

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